Ayer recorrimos de las tradiciones navideñas con vino alrededor del mundo, y hoy mencionaré el maridaje tradicional de navidad:
Las cenas de Navidad son un buen momento para probar estupendos vinos con nuestras recetas favoritas de antaño, y lo mejor de las cestas de Navidad. ¿Será jamón, pavo, ganso o codornices? Si se está buscando opciones de vinos para complementar la comida de estas fechas, aquí una estupenda selección de blancos y tintos versátiles que son seguros para mejorar la reunión de Navidad, una variedad escogida tanto por su presencia y capacidad de adaptación:
- Vinos de servir con Jamón:
Tintos: Beajolais Nouveau, Pinot Noir, Zinfandel, Tempranillo
Blancos: Riesling y Gewurztraminer
- Vinos de servir con Pavo:
Rojos: Pinot Noir, Zinfandel, Syrah / Shiraz, Beajolais Nouveau
Blancos: Sauvignon Blanc, Viognier, Riesling, Gewurztraminer
- Vinos para acompañar Ganso:
Tintos: Zinfandel, Rojo Borgoña, Tempranillo
Blancos: Chardonnay, Sauvignon Blanc
- Vinos para servir con Cerdo:
Cabernet Sauvignon, Zinfandel, Syrah, Tempranillo
Por lo general el vino blanco tiene dificultad para albergar los sabores fuertes que se encuentran en las carnes rojas, por lo que si bien es posible disfrutar de los vinos blancos con carnes rojas, es difícil encontrar un buen maridaje. No hay reglas cuando se trata de comida y vino en cuanto a maridaje en realidad; el vino tinto puede y debe ir con carnes blancas y pescados igual que los vinos blancos pueden y deben ir con queso (a menudo van mejor que los rojos).
El gusto es totalmente subjetivo. El hecho de que un Sauternes es generalmente aceptado como el complemento perfecto para el queso Roquefort no significa que te tenga que gustar, es bueno siempre expresar individualidad y gusto a la hora del maridaje. La consideración clave cuando se compara la comida y el vino es: balance. Hay que tener en cuenta el «peso» y la intensidad de la comida y el vino y tratar de mantener el equilibrio. En otras palabras: Comidas ricas y elaboradas con los vinos de peso, Comida ligera y suave con vinos ligeros y jóvenes.
La mesa de estas fechas se caracteriza por la diversidad de sabores y texturas, y si bien hay reglas básicas que respetar a la hora de la mesa, no hay que temer establecer nuevas tradiciones y explorar nuevas posibilidades en la maravillosa unión de una suculenta cena navideña con un vino de calidad. Las tradiciones son construcciones que evolucionan con el tiempo, como el hombre mismo: hay que celebrar las antiguas y nunca dejar de crear algunas nuevas.
¡A disfrutar! Hoy te recomendamos 2 vinos no tan conocidos que deslumbrarán con cualquier comida:
Semele Crianza 2009
Semele Crianza 2009, un gran vino de Ribera del Duero a un precio excelente
Parés Baltà Blanc de Pacs 2011
Parés Baltà Blanc de Pacs 2011, vino alegre y fresco en el que la uva Xarel·lo nos enseña su mejor cara.